Darío de Jesús Gómez Zapata, nacido en San Jerónimo, Antioquia, Colombia un 6 de febrero de 1951. Es un cantante y compositor de la música popular colombiana, conocido con el apodo artístico de El Rey del Despecho
Unos inicios complicados
Nació alejado de las ciudades, en el campo, en una familia conformada por sus dos padres, y sus dos hermanos. No tenían mucho dinero, pero no les faltaba en amor. Ya desde pequeño empezó de la mano de su padre en las labores del campo. Darío dejó los estudios en quinto de primaria, el sabía que su verdadera pasión era la música. Así que a los 16 años empezó a mandar sus maquetas a las disqueras de Medellín.
Su padre fue víctima de un maleficio, lo que le llevó a maltratos familiares. Fue así como una triste noche, el padre armó la escopeta para matar a su esposa, pero Darío se abalanzó sobre él para evitarlo, cogió la escopeta y se fue corriendo para esconderla en el campo, llevándola en los hombros, se le disparó sin querer, dándole el tiro al padre, que murió desangrado poco después. Este dolor le marcó en su corazón y se puede reflejar en sus canciones. Pasaron unos pocos años, con el apoyo de su madre y hermanos, que consiguió superar los tormentos por las noches.
Le cerraron muchas puertas antes de grabar su primera canción, y mientras él lo seguía intentando trabajó como mecánico en el taller familiar.
Carrera Musical
Estando en Medellín, por recomendación de un amigo, llegó hasta Codiscos, donde se dio a conocer sus primeras producciones musicales. En 1977 Gómez ya se desempeñaba como director artístico en una compañía. En sus notas se destacan temas de corte decembrino, los de tono picaresco, los vallenatos y los bailables. Fue entonces cuando decidió integrar con su hermano Heriberto Gómez el grupo «Los Legendarios». Su primer gran éxito es “Ángel perdido”, es inspirado por la muerte de su hermana Rosangela, el 31 de octubre de 1978.
Entrando en 1985, Darío Gómez debutó por primera vez como solista y se apuntó un nuevo triunfo cuando interpretó “Decídelo”, un gran éxito, para posteriormente lanzar su primer larga duración con el nombre de Así se le canta al despecho.
Nadie es eterno en el mundo es su canción más popular el día de hoy. La canción habla sobre la ingratitud que reciben los difuntos luego de que son dejados en sus moradas de descanso, esta canción fue escrita en 1989. El artista se inspiró en el cementerio de San Gerónimo. El 14 de mayo de 2015, Gómez lanzó el video de Me voy a casar, junto al Rey de la Música Popular, Jhonny Rivera. En agosto de ese año lanzaría el remix de No Hay Razón Para Odiarte en colaboración a Yelsid y Andy Rivera grabando por primera vez un reggaeton.
Algunas de las distinciones que ha recibido son el premio Ascap por su tema de Nadie es eterno, en Nueva York, el Pentagrama de Oro, y la corona del Rey del Despecho. En 2007 el músico Darío ha incursionado en el mundo de la actuación para la televisión. En 2009 protagonizó una campaña para la compañía Telefónica Telecom de Colombia.
Actualidad
Hoy el famoso Darío Gómez mira hacia atrás y no se arrepiente de nada. Tras unos inicios muy difíciles y lleno de dolor, el artista reconoce que esos sucesos le han permitido llegar hasta donde está ahora, con unos valores y siendo padre y abuelo de una linda familia. Orgulloso de todo el esfuerzo que hizo para alcanzar el éxito en lo que era su pasión, la música.