Yerry Fernando Mina González es un futbolista colombiano, que juega como defensa central y su equipo actual es el Everton Football Club de la Premier League. Además, es internacional con la selección de fútbol de Colombia.
Una frase que marcó al futbolista, se la dijo un profesor, y que le recuerda el camino que debe recorrer es:
“Tener los pies en la tierra y los ojos en el cielo”
Yerry Mina viene de una familia muy humilde. Cuando era más pequeño, para poder ir a entrenar, tenía que recorrer distancias muy largas solo, ya que no tenía para poder pagar los pasajes. Caminaba de Puerto Tejada hasta Ortizal, arriesgando su vida…
No tenía para pagar el transporte público, y necesitaba dinero para poder ahorrar, pagar sus estudios y ayudar a su familia. Empezó a trabajar llevando canastos a la galería. Con eso solo ganaba 4.000 pesos, de los cuales les daba 3.000 a su madre, y los otros se los guardaba para él y los estudios.
Todo ese sufrimiento, las vivencias tan complicadas le fortalecieron como persona, le motivaban a seguir adelante y buscar un camino lleno de éxito.
Recién llegado al Deportivo Pasto, en el segundo equipo. Un día llegó su primo, que ya había jugado en ese equipo, tuvieron una conversación, Yerry estaba desanimado, ya que veía que no alcanzaba el primer equipo y no ganaba dinero. El colombiano estaba desesperado y le decía a su primo que ya no podía más, que quería buscar otro club. Su primo le dijo que aguntarà. Pero fue entonces cuando la madre le pidió dinero a su primo, y eso a Yerry le sentó muy mal, como hijo no poder ayudar a su mama. Se pasó unos días encerrado sin querer salir, pero se dió cuenta que era su momento y que tenía que aprovecharlo. Decidió salir al campo de entrenamiento dispuesto a reventar a los profesionales, después de ese entreno lo llamaron para entrenar con el primer equipo, donde consiguió establecerse y lograr un sueldo de 100.000 pesos, de los cuales le daba 60.000 a su madre, y el resto para poder vivir el.
Esa vivencia, esa rabia y motivación que demostraba en el campo, y sobre todo viendo la recompensa, siguió con esa mentalidad, de que siempre que saliera al campo, iría a por todas.
En la entrevista con Yerry Mina, nos comenta que han sido todas esas experiencias las que han hecho llegar donde está, y son las que hace que cada vez que salga al campo quiera sacar lo mejor de él.
Es un jugador que tiene solo 25 años de edad, tiene mucho recorrido por delante. Sus lesiones le han jugado un mal trago, pero actualmente es uno de los mejores centrales que hay, y se espera mucho de él, ya que sus características tienen mucho potencial.
Una vez le dijo un entrenador: ¿tú eres alto y fuerte no? a lo que Mina contestó que sí, y el entrenador le dijo, PUES TIENES QUE SER GRANDE. Yerry Mina tiene muy claro lo que quiere y está trabajando para ser grande.